La filosofía empieza hablar de la angustia y de la muerte,
de la vida en el anonimato, que son existenciales, con un grado de profundidad
enorme, y no es porque a Heidegger le interesase la existencia sino que además
somos seres, y él dice que también le interesa recuperar el sentido de la
realidad, que piensa que su sociedad contemporánea estaba perdiendo el sentido
de la realidad misma, porque se ha demostrado que ya no nos enfrentamos con las
cosas como en la vida tradicional que se veían las cosas de primera mano, y en
contacto con los ciclos de la naturaleza, tristeza, alegría, ahora es la
sociedad del espectáculo, y todo parece un teatro, y se vive en el engaño.
En lugar de vivir las cosas se trataba de mostrar a los demás lo bien que está, no hay
penas, dolor, todo es felicidad, y la realidad se pierde, viviendo en la
ficción, sea perdido de vista la teoría de las cosas, viviendo en el equívoco y
no viviendo en la realidad de las cosas.
Heidegger se adelantó a muchas de las cosas que sucederían,
y se trataba de recuperar la referencia real y viviendo en lo ficticio,
diciendo que eso se haría a través de un ente que somos nosotros, y que estamos
aquí y como existentes que somos tenemos que buscarnos la vida, para lo cual
hay que reflexionar de lo que hay y comprender lo que sucede en realidad, para
podernos desenvolver en la vida, y no tenemos más remedio que existir. Se puede
ser inculto y saber de la realidad de la vida, y la realidad de las cosas.
LA EXISTENCIA
Vidas existenciales inauténticas e hizo un análisis muy
profundo de lo que pasaba, no hay más remedio que existir e comprender nuestra
existencia.
Las características de esa existencia.
La primera característica, somos nosotros, es que somos
mundanos, y dice Heidegger que estamos arrojados a la existencia cada uno de
nosotros, y no a cualquier existencia sino a un mundo concreto, en una familia
concreta, en una sociedad concreta, en un lugar concreto, en un año concreto,
etc.
Todos los seres humanos existimos en un mundo, existimos en
concreto, no en abstracto, todo se entiende en plan existencial, referido a la
propia existencia.
El mundo son cosas que forman parte de nuestra vida y
usamos parte de nuestro tiempo en ello, la música, naturaleza, mascotas, por
ejemplo, y son cosas que cuidamos y de las que nos ocupamos porque forman parte
de nuestra existencia, y al existir nos hacemos cargo de todo lo que forma
parte de nuestra existencia, amigos, hobbies, y Heidegger dedica que el mundo
que está a la mano, de lo que te ocupas, y lo haces porque te gusta y quieres,
y forma parte de nuestra vida.
También nos ocupamos que cosas que no conocemos, y según
Heidegger hay cosas que son muy cercanas a nosotros y no las conocemos, lo más
importante no es conocer, sino hacernos cargo de las cosas que apreciamos y
también detestamos, es una relación fáctica con las cosas, otras no entendemos.
El conocimiento forma parte de nuestra vida.
Heidegger crítica gran parte de la filosofía moderna, que
había considerado preeminente la filosofía del conocimiento, que era lo más
importante, primero vivir después filosofar, Primum vivere deinde philosophari.
Cita de Heidegger.
El problema de si existe un mundo y si puede ser el
problema planteado por el hombre eso del ser en el mundo carece de sentido (Ser
y Tiempo).
El ser humano que existe en un mundo y se pregunte sobre la
realidad no tiene sentido, porque ya está en él.
Ese problema filosófico que se llamaba silogismo que dice
que el ser humano esta solo consigo mismo, y Heidegger dice que eso no tiene
sentido porque siempre existimos en un mundo y con las cosas que tiene el
mundo.
En la relación del ser humano con el ser, se dice que el
mundo es un conjunto de cosas que tenemos a la mano con las que convivimos y
con las que vamos desarrollando nuestra existencia, y eso significa que hay
ciertas cosas, que hasta que no hemos tomado conciencia de ellas y no nos hemos
dado cuenta de su utilidad para nuestra existencia, pues no han formado a pasar
parte de nuestro mundo, como el carbón que al usarlo se ha transformado la
existencia del ser humano, y con ello no se cambia el mundo, pero sí nosotros.
Descartes se preguntaba si existía el mundo, y Husserl no
negaba la facticidad del mundo, y quería descubrir sentido que era fruto del a
reflexión, pero para Heidegger no tenía sentido preguntarse por la existencia
del mundo, y se da por hecho.
Heidegger lo que dice que lo de Descartes carece de sentido
al preguntarse si el mundo existe, porque somos mundanos, somos entes lejos de
ser seres.
Los humanos vamos transformando el mundo, conforme vamos
viviendo y una vez que hemos sido arrojados a la existencia no queda más
remedio que vivir, actuar y proyectar que hacer en el mundo y haciendo eso se
va transformando uno mismo y a la vez al mundo.
No solo estamos en un mundo en el que hay cosas, estamos en
un mundo donde hay otros humanos, otros existentes, y no tiene sentido
preguntarse por la existencia del otro, porque el otro existe simultáneamente y
sin unos otros uno no puede existir, existimos por los otros y con los otros.
Heidegger cuando habla del cuidado de los otros y del mundo
ya que tenía una fuerte conciencia ecológica
ya que procedía del mundo rural y había estado mucho en contacto con la
naturaleza, y nos vamos transformando nosotros mismos y el mundo porque forma
parte de nuestro proyecto existencial, pero lo mismo los otros, y por eso hay
que cuidar de los otros igual que cuidamos hay que preocuparse y ocuparnos del
mundo que nos rodea porque tenemos que desarrollar nuestra existencia y ocupar
de ella, y de nosotros.
EXISTENCIA AUTÉNTICA E INAUTÉNTICA
Nos podemos relacionar con los otros de un modo auténtico o
inauténtico.
De modo autentico es cuando nos comportamos con ellos
cuando los otros son verdaderamente como existentes que tienen que vivir su propia existencia.
Me comporto de modo inauténtico cuando no me porto con
ellos como lo que son, como seres que tienen que llevar a cabo su propia
existencia.
Si no se trata a nadie como a una persona al final uno se
queda solo, pues no se ha relacionado nunca como una persona.
Por lo tanto, si quieres cuidar de tu propia vida y
ocuparte de tu propia existencia, puesto que existes en un mundo como los
otros, tienes que ocuparte de los otros y ocuparte de ellos y cuidar y ocuparte
el mundo.
Siendo contradictorio en su vida, ya que era nazi y nunca
condenó el exterminio de los judíos.
Ocupándote y cuidándote del resto de los otros eso nos hace
a nosotros más libres.
Es mejor vivir en un mundo donde los otros se pueden
desarrollar como personas a vivir en un mundo rodeado de humanos a los que se
está explotando, dominando, esclavizando, por ser mucho más enriquecedor para
uno mismo vivir entre per4onas libres con las que contribuyen a que uno
desarrolle la forma de ver el mundo, y las ideas.
La libertad propia aumenta si el otro es más libre.
La filosofía debe ser una forma de vida.
LA EXISTENCIA Y LOS SENTIMIENTOS
A Heidegger lo que le interesa es la existencia personal de
cada uno, y eso es tratar y ocuparte y cuidar de las cosas que forman parte de
la vida individual, esa ocupación no solo es pensarlas.
EL TEMPLE
La existencia es tratar cuidar y ocuparte de las cosas, y
esa ocupación no entraña solo pensarlas, sino también quererlas, aceptarlas,
etc. y lo que pasa en que los sentimientos empiezan a cobrar una importancia capital
para Heidegger, porque nuestro contacto con las cosas no solo es intelectual,
también es vital, y habla del TEMPLE (SORGE)
que sería como la luz, que ánimo tiene la persona, pudiendo haber varias
a la vez, se puede estar cansado y a la vez expectante, pero siempre hay uno
que es más.
Al haber vivido las guerras mundiales, era bastante pesimistas,
en ese momento, y Heidegger se fija
sobre todo que el temple en una existencia autentica.
Todo lo que suponga angustia se aparta como si no fuera
real, y al hacerlo se vive una vida irreal.
LA COMPRENSIÓN
Es importante porque tenemos que saber lo que hay para
poder desarrollar nuestra existencia, pero con la comprensión Heidegger hace
referencia a eso, al saber como funcionan las cosas en el mundo, y ese
conocimiento que permite vivir es la base de los demás.
Los literatos y poetas son los que se dan cuenta de la
profundidad de la existencia humana, un conocimiento filosófico no puede ser
profundo si no se tiene en cuenta la existencia, pues pierde el sentido.
La comprensión es saber cómo funciona el mundo es la base
de todo conocimiento teórico.
EL HABLA
El habla no es la habladuría a la que también hace
referencia Heidegger.
El habla es un aspecto muy importante, los conceptos van
unidos a las palabras y le da forma a la palabra. Se puede expresar un
concepto, la palabra en una lengua, pero siempre la palabra va asociada a una
palabra, no se piensa en abstracto, los conceptos siempre vienen marcados por
una palabra.
Las palabras sirven para ordenar nuestra existencia.
Siempre hay una categoría una palabra que ayuda a saber cómo hay que actuar.
Las palabras ayudan a saber cómo debemos dirigirnos en la existencia. Es como una lista para ir al supermercado, y
para encontrar las cosas y no perdernos hay que mirar los carteles donde están
las cosas.
El habla son como etiquetas que nos hacer saber y hay que
actuar en la vida, y ayudan a ordenar nuestra propia vida, hablando se van
ordenando los sentimientos, y poner orden a nuestra existencia, los
sentimientos, y saber cómo orientarnos.
HABLADURÍA
Cuando en lugar de usar correctamente la palabra, nos
confunde, y las informaciones son equivocas, parecen decir una cosa y dicen
otra, y en lugar de desvelar lo que ocurre hace lo contrario lo oculta,
convirtiéndose en habladuría sino se comprueba oculta.
SORGE
Significa cuidado, ocuparse, procurar. Todas las ideas que
va a utilizar Heidegger siempre se refieren a la existencia, y el sorge
“ocuparse de”, es nuestra de las formas
más radicales de estar en el mundo porque hay que ocuparse de uno mismo, de
existir, dela propia vida, pues nadie puede vivir por tí, y no se puede pasar
la tarea a otro, hay que decidir uno mismo, y si lo haces que otro se ocupe de
tus cosas dejas de ser auténtico, pero ya estás decidiendo.
TRES CARACTERÍSTICAS FUNDAMENTALES
Existenciariedad. (Existe y tiene que comportarse);
Facticidad (se halla siempre en una posibilidad de sí
mismo),
La caída (finitud, el ahí del ser). En la angustia se le
revela su originario “poder
ser”, es decir, su ´finitud, no está acabado y, por eso
puede ser o no ser.
La
existenciariedad significa que no nacemos ya hechos, sino que
somos arrojados, y hay que portarse a si mismo, comportarse, tratando de llevar
tu propia vida, aunque a veces procuramos que sean otros los que la llevan pero
es imposible, nacemos solos (Gila).
La
facticidad, es que somos seres caídos como decía Platón que significa
que no estamos acabados, estamos a medio hacer, somos pura posibilidad, o sea,
no somos, somos contingentes y finitos, y nunca se llega a ser.
Somos yoes posibles, pero se puede ser uno o llegar a ser
muchos otros, somos una posibilidad de uno mismo. La facticidad significa que
eres en concreto una de las posibilidades, pero se podría haber sido otras.
Se el que es, nadie puede decir al final de su vida el que
podía haber sido, es imposible, porque el ser consiste en proyectarse siempre,
y no cabe otro, pero nuestro ser no es nunca, pues nuestro ser consiste en
poder ser, siempre vivimos en el futuro.
La existencia inauténtica, es la tendencia que tiene el ser
humano, y hay formas, se tenemos que: hacernos cargo de nuestra propia vida, la
tarea de cuidar de otros, del mundo, etc. eso es muy costoso e implica mucha
responsabilidad y el humano no quiere hacerse cargo de todo eso, un asumir la
tarea que supone nuestra existencia, por ser muy costoso, compromiso
responsabilidad, y vivimos en la ilusión en lugar de vivir en la curiosidad y
preocuparse de existir, y nos distraemos
con la vida de los otros, que es el COTILLEO.
Heidegger estaba dando una conferencia en Alemania y Ortega
y Gasset le dijo: Usted, señor Heidegger tiene dos cosas de las que hay que
tener para ser filósofo, pero le falta una que es bailar.
Heidegger entiende la curiosidad como cotilleo, lo que
dispersa de la tarea primordial que es la DASEIN.
El lenguaje que en lugar de usar se oculta, se cotillea, y
en lugar de comunicar a través del habla,
se dice lo que se dice, se hace lo que se hace.
El equívoco son esas personas que ven el cotilleo la
imagen, su vida es equivoca, pues la muestra que se muestra ahí es ilusoria y
no se corresponde con la realidad, y su existencia es inauténtica, es no vivir
en primera persona, y no hacerse cargo de su propia vida, no querer
responsabilizarse, y evitar el compromiso de su propia existencia.
Otra forma de existencia inauténtica es cuando uno se
pierde las cosas, cuando se hace un proyecto, pero todas tienen que tener
sentido respecto a la propia existencia, y cuando uno de esos proyectos se
convierte en exclusivo, y en lugar de formar parte de la propia vida y de la
propia existencia lo único que tiene sentido en la vida es eso. Nos perdemos en
las cosas si consideramos que un proyecto es fundamental, cierra las
posibilidades de la existencia.
Lo que te saca de la superficialidad, banalidad, y hace
darse cuenta de que hacer real ese proyecto no es tan importante, es la muerte.
Tiene que haber alguna realidad que te ponga cara cara con lo que tú eres.
Heidegger cuando habla de morir no es solo el hecho que
tiene en un momento determinado, que seamos mortales significa tomar conciencia
de que la mortalidad es real, y eso se evita. Pero tener conciencia de ella es
lo que da a cada cosa el valor verdadero, y lo que libera. Cuando un emperador
romano venia victorioso de una gran batalla, le echaban ceniza para recordar
que era mortal. Ignorar la muerte es pensar que seremos eternos, jóvenes, y eso
es una ficción de claudicar y obcecarnos con un proyecto, y al final se ve que
eso no era tan importante.
Para situar cada cosa en su lugar y darnos cuenta de lo
verdadero importante, solo está la muerte, y Heidegger habla en de una forma
tan radical porque es la puerta que cierra cualquier posibilidad, y detrás de
ella no hay nada. Ser mortal significa poder o no poder ser, y forma parte de
la existencia. Somos seres mortales y desde el momento de nacer vamos a morir
irremediablemente.
Afirma Heidegger: “Hacerse anticipadamente libres por la
propia muerte libera de la dispersión en las posibilidades que se entrelazan
por azar, de manera que las posibilidades efectivas, las que están situadas más
allá de aquella que es insuperable (la muerte), puedan comprenderse y elegirse
de una manera auténtica” (Ser y tiempo)
Cuando se elige algo es cuando se da cuenta de la verdadera
dimensión de lo elegido, porque vivimos como si fuéramos eternos y eso es
ilusión, vivimos como inmortales. Se es más feliz cuando nos liberamos de
proyectos, y se es más libre.
Morir es vital para poner cada cosa en su sitio, y
descubrir el verdadero sentido de la existencia.
La muerte dice Heidegger, es la posibilidad de todas las
cosas que puedes hacer, la posibilidad más propia incondicionada, y es la más
propia por ser la más cercana, podemos ser, somos contingentes y en cualquier
momento podemos desaparecer, es lo más propio, lo demás no lo sabemos, pero que
vamos a morir, sí lo sabemos, y es lo más propio del ser, demás se puede
conseguir o no, los proyectos no se saben, pueden ser o no.
La muerte es incondicionada nadie puede morir por otro, nadie
puede asumir la muerte de otro, se asume personalmente y solo, es la última
posibilidad, lo último que puede hacer un ser vivo, y ya no se puede hacer anda
más, lo último que se puede hacer es morir, y cierra el resto de las
posibilidades.
Vivir para morir es lo que permite a los mortales, existir
al ente, es lo que permite y evita que nos dispersemos en las cosas, y lo que
libera de la banalidad, la superficialidad, de una existencia inauténtica.
Hacer las cosas que se hacen, no es porque se hacen, sino
por rutina, inercia, se dice lo que se dice, se hace lo que se hace, hacer pro
el qué dirán, todas esas cosas hacen que no se viva la vida auténticamente y en
primera persona, darse cuenta que estamos aquí por un tiempo limitado hace que
vivir las cosas con intensidad, y en positivo.
A veces la vida produce angustia, Heidegger cuando se toma conciencia
de la propia muerte, no cuando se hace crea una teoría sobre la muerte, cuando
uno se da cuenta de su propia muerte es
cuando se crea el sentimiento de angustia, si no se tiene un sentimiento
de angustia no se hace cargo de que se va a morir, y es algo muy teórico.
La angustia es algo que no nos gusta y la tratamos de
evitar y se domestica la angustia y se transforma en temor, y no es lo mismo
temor que angustia. Temor a los perros es algo concreto, es un ente.
El miedo es algo externo a nosotros, y la muerte se
convierte en un acontecimiento que ocurre al final, como termino, estás y se de
repente ya no estás, porque somos mortales, y eso crea angustia, pero el miedo
hace como si se viviera eternamente y cuando venga ya llegará, como algo ajeno
a nosotros.
Cuando nos damos cuenta de que existe la muerte le damos
sentido a nuestra vida, por lo que el miedo es una domesticación.
SERES TEMPORALES
Heidegger dice que todos somos mundanos y excéntricos,
porque no nacemos centrados, ni hechos sabiendo lo que tenemos que hacer y con
la vida resuelta, existimos porque nuestro ser esta fuera de nosotros mismos,
no nacemos siendo lo que tendríamos que ser, tenemos que ir forjando nuestra
propia biografía y eso supone una temporalidad, somos seres temporales que no
hacemos poco a poco.
Cuando Heidegger habla del TIEMPO no se refiere al tiempo
cronológico, es algo que pasó y ya no está, y el futuro llegará y no tiene nada
que ver con nosotros, habla del tiempo en relación a la existencia SER Y
TIEMPO, y el ser de las cosas se conforma según vamos vi viendo, por lo que la
temporalidad es muy importante.
El pasado no es algo que aconteció y no tiene que ver con
el presente, pero nosotros somos nuestro pasado y la forma de haberlo sido, y
eso significa que el pasado deja huella en nosotros, incluso físicamente, y el
pasado forma parte de nuestro presente y las posibilidades presentes dependen
de lo que se ha hecho en el pasado.
El presente es aquello de lo que nos ocupamos en alas del
futuro, de los proyectos, y lo más importante y se refiere al tiempo respecto a
la existencia lo llama Heidegger éxtasis, lo que no está estático. El pasado que
afecta al presente y se proyecta en el fututo. Siempre estamos intentando ser y eso es el
futuro, y es lo que da sentido al pasado y al presente.
Se puede también vivir inauténticamente depende de si la existencia
es auténtica o inauténtica se puede vivir de modo autentico o inauténtico el
pasado, el presente y el futuro, y se vive de un modo inauténtico el pasado
cuando uno no asume su pasado, o cuando uno rechaza por completo su pasado que
es parte del ser o uno lo admite pero no se lo apropia, y no lo asume críticamente
y repite el pasado, sin futuro, el presente se vive auténticamente cuanto nos
ocupamos de lo que somos gracias a nuestro pasado para proyectar el futuro, y
el presente se vive inauténticamente cuando nos anclamos obsesionados al pasado y nos olvidamos del presente, hay
que pasar página, sino se repite el pasado continuamente de una forma inauténtica.
Es una vida inauténtica si esperamos la aprobación o
aplauso se otros y no es nuestra vida, pues si los otros no aplauden no se
logra el éxito y seriamos unos fracasados, viviendo una vida inauténtica, pues
no es nuestra vida.
Y se llama éxtasis al ir viviendo, pues el pasado no es el
pasado y ya está, el pasado es todo aquello que permite proyectar el futuro, y
el pasado es algo dinámico, no es estático. El pasado se explica siempre en
relación a la propia existencia, son extáticos porque depende de nosotros, y el
pasado siempre se va moviendo, no es estático. Pasado, presente y futuro es biográfico
no cronológicos.
Heidegger dice que el presente auténtico:
“El presente auténtico consiste en no verse absorbido por
las cosas que tiene que
hacer, sino en aceptar como propio el tiempo que le
corresponde y ser fiel a él,
asumiendo como propio el destino de la comunidad a la que
pertenece.”
Se vive el tiempo que nos toca vivir, hacernos cargo de las
circunstancias que nos toca vivir, asumiendo como propio el destino a la comunidad
a la que se pertenece, y el destino no lo dice Heidegger. Cada uno se proyecta
así mismo y su relación con los otros.
VIDEO DE HEIDEGGER: Humano todo un humano.
Para ver el video pulsar la imagen.
Heidegger es el primer filosofo que habla de la existencia.
Cuando dice que tenemos que proyectarnos es que tenemos que vivir y actuar, para
darnos un sentido. Las cosas se hacen con un sentido, y vivir significa que
tenemos que actuar y nos estamos proyectando nuestra vida, según vivimos nos
estamos configurando constantemente.